Existen personas especiales, personas que poseen un don que los diferencia del resto de los seres humanos… Son hombres y mujeres que se esconden, huyen y sufren. Son repudiados y temidos por muchos y comprendidos por muy pocos.
¿A dónde ir cuando no eres aceptado en ningún lugar? ¿Qué hacer cuando posees un don que te puede condenar a una prisión perpetua o, incluso, a la muerte?
¿A dónde ir cuando no eres aceptado en ningún lugar? ¿Qué hacer cuando posees un don que te puede condenar a una prisión perpetua o, incluso, a la muerte?
En Gracebell City, una fría región enclavada en un paisaje entre el mar y las montañas, un Gobierno dictador controla hasta el último resquicio de libertad de sus ciudadanos. La Iglesia Anglicana ha afianzado su poder y su moral empapa cada una de las conservadoras mentes que dirigen la urbe.
Los residentes son obligados a asistir a todo ritual sagrado promovido por la Iglesia, a contraer matrimonio para poder darse la mano mientras pasean por la calle, a ocultarse si son especiales… El ser homosexual o rendir culto a una religión que no sea la anglicana es un billete de ida a la cárcel o al manicomio, los edificios más habitados de la ciudad gracias a las Fuerzas de Seguridad, fieles sirvientes del Gobierno fascista.
En este lugar viven ciertos individuos, los cuales poseen dones extraordinarios. Ver el futuro, leer las mentes, controlar los elementos… Poderes temidos por los regentes y condenados por los mismos. ¿Por qué intentar comprender lo diferente cuando puedes erradicarlo?
En esta ciudad en la que la represión y la lucha por la independencia conviven en guerra constante, un don poderoso podría significar la salvación de todos o la condenación eterna.
Los residentes son obligados a asistir a todo ritual sagrado promovido por la Iglesia, a contraer matrimonio para poder darse la mano mientras pasean por la calle, a ocultarse si son especiales… El ser homosexual o rendir culto a una religión que no sea la anglicana es un billete de ida a la cárcel o al manicomio, los edificios más habitados de la ciudad gracias a las Fuerzas de Seguridad, fieles sirvientes del Gobierno fascista.
En este lugar viven ciertos individuos, los cuales poseen dones extraordinarios. Ver el futuro, leer las mentes, controlar los elementos… Poderes temidos por los regentes y condenados por los mismos. ¿Por qué intentar comprender lo diferente cuando puedes erradicarlo?
En esta ciudad en la que la represión y la lucha por la independencia conviven en guerra constante, un don poderoso podría significar la salvación de todos o la condenación eterna.
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